La «bala de plata» de Jair Bolsonaro, tras su inhabilitación: su esposa, candidata a presidente

Un fallo de la justicia electoral inhabilitó políticamente al ex mandatario de Brasil hasta 2030. Pero ya tiene un plan.

Golpeado tras un fallo que tuvo en vilo a gran parte de su país este viernes, el ex presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó que la decisión del Tribunal Superior Electoral (TSE) de dejarlo inelegible hasta 2030 por abuso del poder y uso indebido de los medios públicos de comunicación en las elecciones de 2022 fue una «puñalada en la espalda».

Pero ​más tarde, reveló que ya tiene un plan para que la derecha pueda volver al poder en las elecciones presidenciales previstas para 2026: su esposa, Michelle, podría ser candidata. Aunque admitió que «le falta experiencia para eso».

En una entrevista con el diario Folha de Sao Paulo, el líder de ultraderecha afirmó que no se alejará de la política pese al fallo que lo inhabilita para presentarse a elecciones durante 8 años.

«Tengo la bala de plata también», dijo, y enseguida comentó la posibilidad de que su esposa se postule a la presidencia en 2026. De hecho, Michelle ya tuvo una actuación destacada durante la campaña presidencial de 2022.

«Si ella quisiera, puede postularse como candidata. Pero lo que le digo a Michelle es que ella no tiene experiencia. Ser alcalde de un pueblo pequeño ya no es fácil. Tratar con 594 parlamentarios tampoco es fácil. Creo que le falta la experiencia para eso», expresó el ex mandatario.

Golpe

Tras la sentencia del Tribunal Supremo Electoral, que tomó la decisión este viernes tras una larga sesión que había comenzado el viernes, Bolsonaro se mostró afectado.

«Recientemente recibí una puñalada en la barriga y ahora me dieron una puñalada en la espalda con la inhabilitación política por abuso de poder político», afirmó el líder de la ultraderecha en Brasil en una inmediata reacción a la decisión de la máxima autoridad electoral y al recordar el atentado que sufrió durante la campaña electoral de 2018.

En una declaración a la prensa en la ciudad de Belo Horizonte, Bolsonaro dijo que seguirá trabajando «dentro de las cuatro líneas» de la Constitución, algo que según apuntó, es un «esfuerzo» que «no tuvo su debido valor reconocido».

«Hoy sufro una inhabilitación, no me gusta convertirme en inelegible en la política. Esa frase no es mía: nadie mata, nadie muere», agregó.

«No estoy muerto, vamos a seguir trabajando», afirmó el líder de ultraderecha. «Mi apelación será ante el Supremo Tribunal Federal», añadió.

El juez Alexandre de Moraes, presidente de Supremo Tribunal Electoral de Brasil, que este viernes falló contra Jair Bolsonaro. Foto: AFP
El juez Alexandre de Moraes, presidente de Supremo Tribunal Electoral de Brasil, que este viernes falló contra Jair Bolsonaro. Foto: AFP

Bolsonaro fue despojado de sus derechos políticos por ocho años por el tribunal electoral, en el que, por cinco votos contra dos, se le declaró culpable de «abusos de poder» durante la campaña electoral para las elecciones presidenciales del año pasado, en las que fue derrotado por el socialdemócrata Luiz Inácio Lula da Silva.

El líder de la ultraderecha, de 68 años y que ya había manifestado su intención de disputar las presidenciales de 2026, no podrá concurrir a cargos electivos ni ejercer puestos en la administración pública durante un plazo de ocho años, contados a partir de octubre de 2022.

«Luiz Inácio Lula da Silva ya no tendrá contrincante. Quién será la oposición en las elecciones presidenciales de 2026?», se preguntó el ex presidente, enemigo político del actual mandatario.

Cuándo podrá ser candidato

La decisión, por lo mismo, le permite disputar las presidenciales de 2030, que están programadas para octubre de ese año y cuando tendrá 75 años.

Un fotógrafo toma una imagen de Jair Bolsonaro, durante una rueda de prensa este viernes en Belo Horizonte, Brasil. Foto: REUTERS
Un fotógrafo toma una imagen de Jair Bolsonaro, durante una rueda de prensa este viernes en Belo Horizonte, Brasil. Foto: REUTERS

El líder ultraderechista también está esperanzado en la posibilidad ya anticipada por algunos de sus correligionarios políticos de que el Congreso apruebe un proyecto de ley amnistiando a los condenados por delitos electorales en 2022, que lo beneficiaría y lo volvería a habilitar políticamente.

El juicio contra el ex jefe de Estado tuvo como eje una reunión que Bolsonaro convocó con medio centenar de embajadores extranjeros en la residencia oficial de la Presidencia, el 18 de julio de 2022, para volver a descalificar la transparencia del sistema electoral, poniendo en duda el sistema de voto electrónico, y la propia democracia.

Ese hecho, según dice la sentencia, constituyó un «abuso de poder político, conductas vedadas y desorden informativo» y también un «uso indebido de predios públicos y medios de comunicación», pues Bolsonaro ordenó que la televisión pública transmitiera el evento.

Valdemar Costa Neto, presidente del Partido Liberal (PL), la formación a la que pertenece Bolsonaro, afirmó que está incrédulo ante lo ocurrido por ser la primera vez en la historia que un expresidente «pierde sus derechos políticos por hablar».

Fuente: agencias

CB